¿Cómo quitar las canas sin tintes?

Nuestras primeras canas siempre nos traen malas noticias ya que las asociamos al paso del tiempo y que nos hacemos un poco más viejos. Muchos productos existen, hoy en día, para esconder esos cabellos blancos, pero un grupo de investigadores ha encontrado un tratamiento para combatir esos cabellos no deseados. Todo ha salido por casualidad pero han encontrado una de las principales causas de la manifestación de las canas y este posible tratamiento que nos haría olvidar todos esos tintes.

Una crema para recuperar el color del pelo

Un grupo de científicos se encontraba investigando con una crema para combatir el vitíligo (enfermedad de la piel), cuando se dio cuenta de que también servía para recuperar la coloración natural del pelo. El hallazgo es el primero que propone un tratamiento real que elimina las canas de raíz, a diferencia de los tintes convencionales que lo único que hacen es ocultarlas.

El vitíligo es una enfermedad cutánea de naturaleza autoinmune en la cual se produce una despigmentación a causa de la muerte masiva de melanocitos, las células que producen el color de la piel y el cabello. Los científicos desarrollaron una crema para luchar contra el vitíligo a base de una enzima que se activa por la presencia de luz UVB. La sorpresa fue que, cuando aplicaron la crema a 2.411 pacientes, observaron algo inesperado: no solo remitía las manchas blancas del vitíligo, retornando el color normal de la piel, sino que además también se recuperaba el color del cabello y las pestañas.

El trabajo es fruto de la coordinación de científicos de la Universidad de Bradfort (Reino Unido) y la Universidad de Greifswald (Alemania). Los ingleses habían descubierto en 2009 que la acumulación de agua oxigenada en la piel y los folículos pilosos tenía un papel relevante en el progreso del vitíligo y la canicie. Este acopio sería el responsable de la despigmentación del pelo y la piel desde su interior mientras se forma. Por este motivo, los investigadores alemanes diseñaron una crema que contenía una variante de la enzima catalasa, que esta convierte el agua oxigenada en agua y oxígeno y, por tanto, evitaría su acumulación.

Como muchos aspectos en el mundo de la ciencia, la casualidad juega un papel destacado en los nuevos descubrimientos. Este trabajo también demuestra la importancia de la coordinación entre grupos de investigación básica y aplicada para ampliar el conocimiento científico y mejorar la calidad de vida de las personas.

Factores que favorecen la aparición de las canas y cómo retrasarla

Las canas son uno de los signos más comunes del envejecimiento y, por este motivo, tiene un gran impacto personal y social. Este fallo en el mecanismo de pigmentación del cabello se debe a un proceso biológico complejo en el que participan muchos factores.

Uno de los más importantes está relacionado con el deterioro de los melanocitos, las células encargadas de fabricar la melanina, que es el pigmento que da color a los cabellos y la piel. El cabello blanco asoma con el paso de los años y la edad de inicio varía en función del color de la piel. Así, son los individuos de piel blanca los más precoces (hacia los 30), seguidos de los asiáticos que empiezan a encanecer alrededor de los 40. Más afortunados son los afroamericanos, que no tienen las primeras canas hasta bien entrados los 45 años.

Cuando las canas se manifiestan de forma prematura, antes de los 20 años, casi siempre es debido a factores hereditarios. Además de la edad, el componente más importante en la canicie es la herencia y lo más probable es que se siga el camino de los progenitores, que pueden servir de indicador.

Por otra parte, hay algunas causas que pueden provocar una canicie prematura. Las más frecuentes son los trastornos hormonales, como sucede en algunas enfermedades del tiroides, y la falta de determinados nutrientes y vitaminas, tales como hierro, zinc, cobre y vitaminas B1 y B2. Asimismo, hay que tener en cuenta que el consumo de tabaco y alcohol también pueden adelantar su aparición.

De la misma manera, el cuidado que se le dé al cabello tendrá una gran influencia en la canicie. Mantener una adecuada higiene capilar, no lavar el cabello con agua muy caliente y evitar el abuso del secador eléctrico o planchas son pequeños hábitos que ayudarán a postergarlas. Es recomendable, también, no abusar de los tintes.

 

En cuanto a la apariciones en ambos sexos, suele aparecer más en las mujeres, quienes somos mas propensas, y desde jóvenes tienen a teñir el pelo. La solución es abandonar estos productos y optar por unos más suaves y reservar los tintes para más adelante. Los tintes permanentes aunque sean seguros, se debe dosificar. Muchos de ellos contienen agua oxigenada y amoniaco y su uso excesivo daña el cabello y el cuero cabelludo. También favorecen el desarrollo de la caspa y la caída del pelo.

¿Por qué hay que lavar la fruta?

Siempre se nos ha repetido desde pequeños, que hay que lavar una fruta si esta se come con piel. El caso es que con o sin piel, estas se pueden consumir pero siempre bajo condiciones de higiene. El hecho de comer la fruta con o sin piel respondería más a un tema nutricional ya que ciertas frutas o verduras, al pelarlas, pierden vitaminas que tienen en sus pieles. Además, muchas veces al pelar la fruta, ésta se oscurece por el contacto con el aire.

Lavar y pelar la fruta

Si, en el caso de las frutas que tienen una piel más fina, se opta por no pelarla, es recomendable lavarla para eliminar residuos de plaguicidas o restos de tierra que puedan contener bacterias, virus o parásitos. Debe tenerse en cuenta que, en la mayoría de los casos, la contaminación de la superficie de las frutas procede de las zonas de cultivo, pero también de las manos y utensilios durante la recolección y en casa. Para evitarlo, es primordial realizar un lavado preventivo:

  • Frotar o cepillar las frutas enteras y con piel con agua caliente y jabón o desinfectantes específicos para alimentos durante al menos un minuto. De esta manera, las posibles bacterias y suciedad no contaminarán el alimento por contacto entre la piel y el interior.
  • Aunque no se suele hacer, es recomendable lavar la superficie de las frutas de piel dura, como melón o sandía.
  • Tras el lavado, deben secarse bien, mejor con papel de cocina.
  • Deben retirarse las partes de la fruta que tengan hongos o cortes, así como las zonas demasiado maduras.
  • Las frutas pequeñas como frambuesas o fresas pueden dejarse en remojo unos minutos y escurrirlas bien.
  • Debe prestarse también atención al tallo de ciertas frutas, como las manzanas, que también pueden albergar suciedad y bacterias. Es recomendable cortarlo antes de lavar.

Si, al final, se opta por pelar la fruta, la piel puede aprovecharse para infinidad de preparaciones con total seguridad y reducir así el desperdicio de alimentos. La de los cítricos, por ejemplo, puede utilizarse como aromatizante en ciertas recetas y, si se seca, se puede usar para acompañar bebidas como el té. La piel de la manzana puede guardarse y usar como espesante en la elaboración de guisos; y las de la piña aromatizan platos hechos con cerdo o pollo.

Evitar que la fruta pelada se oxide

Algunos alimentos, como la fruta, cuando entran en contacto con el aire durante un tiempo determinado cambian de color, más oscuro. Es lo que se denomina pardeamiento enzimático, una reacción química que se produce al reaccionar la fruta con el oxígeno del aire. Esto ocurre cuando se pela y se corta la fruta y no se consume en el momento. Esta reacción limita la vida útil de muchas frutas, causa cambios en el aroma y el sabor, y puede llegar a reducir la calidad. Para evitar o retardar la oxidación, puede refrigerarse o envolver con un plástico para impedir que el oxígeno entre en contacto con la fruta. También puede utilizarse jugo de limón, una fruta ácida, con un pH bajo 5, que no se pardean.

Otra manera de evitar el pardeamiento enzimático es el escaldado, ya que la enzima es sensible al calor. Debe tenerse en cuenta, sin embargo, que el calentamiento puede causar cambios en ciertas propiedades organolépticas de la fruta. También el enfriamiento retarda la reacción enzimática, por tanto, la fruta pelada y cortada pueden almacenarse en la nevera, donde tardarán más en oxidarse. Antes de guardarlas en la nevera, deben envolverse con film o en un recipiente hermético.

 

En resumen, según nuestro gusto, podemos pelar o no la fruta. Pero se debe hacer bajo unas higiene específicas con agua caliente y jabón o con desinfectantes específicos y, enseguida, secarlas con papel de cocina. En el caso de no pelar la fruta, ésta aporta más vitaminas pero si prefiere, puede pelarla, y aprovechar la piel para infinitas recetas. En este caso, no olvide cubrir o tapar bien la fruta pelada con plástico envolvente de cocina para que no tengamos sorpresa y que las frutas se vuelven negras.