¿A quién reclamo si la tienda en la que he adquirido un producto o servicio ha cerrado?

Con la crisis económica que estamos atravesando en España y en el resto del mundo, existe una gran cantidad de comercios y empresa que han tenido que echar el cierra. Y aunque se espera una leve mejora de la economía en Europa a partir del año 2014, a día de hoy, el número de autónomos en nuestro país se ha reducido considerablemente en los últimos 3 años. Con la cantidad de comercios que cierran hoy en día, es importante saber a quién tenemos que reclamar por la garantía de un producto que les compramos. En este post veremos cuales son los pasos a seguir en ésta caso.

¿Qué hago si el comercio donde he adquirido mi producto/servicio ha cerrado?

La crisis ha hecho mella en todas las actividades relacionadas con el consumo privado y, en algunos casos, debido al cierre de numerosos establecimientos, los productos o servicios que se ofrecían a los clientes se han quedado en suspenso.

Por ello, es conveniente conocer qué cautelas respecto a garantías,reclamaciones, cambios o devoluciones debe tener un consumidor cuando ha adquirido un artículo en un comercio que cierra sus puertas.

  1. El artículo adquirido cuenta con una garantía de dos años

    En principio, es el comerciante quien responde ante el consumidor de la conformidad de un artículo vendido que, por ser nuevo, tiene una garantía legal de dos años. Cuando es un producto de segunda mano, la garantía legal tiene un plazo no inferior a un año.

    Durante esto tiempos, todos los costes derivados de cualquier anomalía o fallo del artículo corren por cuenta del vendedor, incluidos los gastos de envío. Así, cuando hay una disconformidad con el producto, hay que reclamar al vendedor, que es el garante. El cliente, por su parte, puede decidir que se lo reparen o sustituyan.

  2. Guardar los comprobantes de pago

    El comprador tiene derecho a solicitar al establecimiento donde adquiere un producto un escrito con la garantía, donde se puntualicen los detalles de mayor interés (el bien sobre el que recae la garantía, los plazos, las vías de reclamación, etc.). Por ello, con el fin de poder hacer un cambio, unadevolución o presentar una posible reclamación en el futuro, es imprescindible guardar todos los documentos relacionados con la adquisición (facturas, catálogos, correos electrónicos, resguardos, ofertas comerciales, etc.), con el fin de que el fabricante compruebe que el artículo está en periodo de garantía.

  3. Si el comercio cierra, el responsable de la garantía es el fabricante

    En el caso de que sea imposible hacer valer la garantía frente al vendedor, el responsable de ella es el fabricante (o, en su defecto, el importador). Cuando cierra el establecimiento donde se ha adquirido un artículo, son los fabricantes quienes responden ante cualquier incidencia que presente dicho producto, puesto que la garantía se traslada de forma automática del distribuidor al fabricante, por lo que el comprador deberá contactar directamente con este último para poder disfrutarla.

    De cualquier modo, el cambio nunca puede suponer un gasto para el consumidor. En este sentido, si no se satisface la deuda adquirida con el cliente, se estaría vulnerando el derecho del consumidor como comprador de los productos o servicios de un establecimiento.

  4. Qué ocurre cuando se ha contratado un servicio

    El problema se produce cuando se ha contratado un servicio que se ha pagado y no se ha disfrutado. El consumidor, en estos casos, se encuentra desprotegido ante la quiebra de una empresa de servicios.

    Antes de llegar al concurso de acreedores o a los tribunales, las asociaciones de consumidores y las oficinas de consumo de las comunidades autónomas recomiendan agotar el resto de las vías. Si se abonó el servicio con tarjeta de crédito, se puede tratar de anular el pago o recurrir al seguro asociado a muchos bancos.

  5. Prestar atención a los concursos de acreedores

    Conviene prestar especial atención a las noticias de prensa y de los informativos y al BOE (Boletín Oficial del Estado), ya que si un establecimiento presenta un concurso de acreedores, los plazos para poder personarse en él son breves (el periodo para reclamar en un proceso concursal solo aparece en el BOE).

    Se puede decir que cuando un cliente ha pagado un servicio, es como si hubiera otorgado un crédito a una empresa, por lo que se convierte en acreedor. El concurso es un procedimiento largo en el que, en primer término, se designa un administrador concursal, es decir, una persona que se encargará de gestionar el proceso. Una vez se declara de manera oficial el concurso de acreedores y se publica en el BOE, los consumidores afectados deben comunicar, sin demora, su deuda al administrador.

  6. Afiliarse a una asociación de consumidores

    Numerosos afectados por el cierre de un comercio donde adquirieron un producto recurren a la agrupación en asociaciones para acudir a los tribunales con más fuerza, ya que contratar un abogado entre varias personas es siempre una opción más asequible.

    Las asociaciones de consumidores también desempeñan un papel fundamental si llega el concurso de acreedores, pues suelen aglutinar muchas de las quejas y reclamaciones de clientes que se sienten desamparados. Estas asociaciones son entidades privadas que tienen como finalidad la defensa de los intereses y derechos de los consumidores.

  7. Exponer la queja ante la OMIC

    Las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC) tramitan las reclamaciones que presentan los compradores o las asociaciones de consumidores relacionadas con la adquisición de artículos y la contratación de servicios o suministros (luz, agua, gas, telefonía e Internet).

    El consumidor que plantee una reclamación contra un comercio que ha cerrado por un producto adquirido en él, o contra un fabricante, debe cumplimentar un impreso oficial de la OMIC, que se entrega en el Registro del ayuntamiento del municipio de que se trate, en los Registros de la Administración General del Estado y de las Comunidades Autónomas, en las oficinas de registro dispuestas al efecto o a través de la OMIC Virtual en Internet (cuando la localidad ofrece este servicio).

    Según cada caso, la OMIC traslada la reclamación al distribuidor o al fabricante para intentar llegar a un acuerdo que satisfaga al consumidor. Sin embargo, cuando no se alcanza un acuerdo, la OMIC remite la queja a la Junta Arbitral de Consumo.

  8. Reclamar ante el Sistema Arbitral de Consumo

    Cuando el comercio reclamado ha cerrado y el fabricante del producto no contesta puede acudir a las Juntas Arbitrales de Consumo. El Sistema Arbitral de Consumo es el órgano extrajudicial de las Administraciones Públicas para resolver los conflictos entre consumidores y empresarios, en el que un órgano arbitral adopta una decisión de obligado cumplimiento para ambas partes: es un procedimiento rápido y gratuito.

    Con lo que el consumidor tendrá que acudir a los tribunales si el establecimiento o fabricante reclamados no pertenecen al Sistema Arbitral de Consumo

  9. Acudir a los tribunales

    Ccuando el consumidor ya ha agotado sin éxito las anteriores instancias, puede formalizar su queja en vía judicial y obtener la resolución de un juez que solucione el conflicto. Para ello, se debe presentar un escrito de demanda en el Juzgado de Primera Instancia del domicilio del establecimiento o fabricante demandado, o del lugar donde se realizó la actividad reclamada. La demanda tiene que estar fundamentada y ha de ir acompañarla de toda la documentación y pruebas posibles. En caso de disconformidad con la sentencia, se puede plantear un recurso de apelación.

 

Desde que empezó la crisis en el año 2008, se calcula que más de 100.000 autónomos con comercios han tenido que echar el cierre. Cuando nos enfrentamos a uno de estos problemas, nunca sabemos quién tiene que responder por la garantía de nuestro producto. Es importante que para poder hacer uso de la garantía se conserven todas las facturas y documentos relacionados con la compra para que el fabricante compruebe que el artículo está en garantía.

¿Podemos controlar los dolores de cabeza de migrañas?

Las migrañas afecta a muchas mujeres desde edades tempranas. Es una de las patologías más incapacitantes que pueden afectar al día a día de las mujeres ya que si llegan los dolors de cabeza, es prácticamente imposible seguir haciendo lo que teníamos pensado. Hoy en día, según los expertos, es una patología que puede controlarse: en este post vamos a ver cuales son las claves para controlarlas.

Los síntomas

Como bien lo saben quienes las sufren, las migrañas se manifiestan por la presencia de unos dolores muy intensos en la cabeza en forma de ataques periódicos que pueden durar hasta 72 horas. Como explican los expertos, las causa de este dolor es la activación del sistema trigémico vascular, que está al origen de una inflamación neurológica. Pero los peores síntomas, es cuando además del dolor aparecen síntomas digestivos como la inapetencia o incluso nauseas y vómitos así como la hipersinsibilidad a los estímulos externos. Cualquier cosa puede ser molesta: la luz, los ruidos o los olores. Es una patología capaz de alterar la capacidad de hacer cualquier cosa en mayor o menor medida.

El origen

Desde siempre, los expertos hablan de una predisposición genética a sufrir esta patología. Pero también hay que tener en cuenta que algunos elementos de carácter psicológicos, biológicos o ambientales puede aumentar la frecuencia de los ataques que se pueden padecer. Hasta ahora, ningún factor externo ha sido capaz de aumentar la prevalencia de esta patología. Aunque en la gran mayoría la aparición de migrañas es totalmente genético, recientes estudios sitúan la obesidad, los trastornos del sueño o incluso el estrés como posibles desencadenantes de la aparición de esta enfermedad.

¿Cómo tratarla?

Los medicamentos recomendados por nuestro médico y farmacéutico son la primera opción para combatir los ataques de migraña. Existen otras terapias, avaladas por numerosos pacientes que sufren de migrañas, que pueden ayudar a aliviar el dolor como la acupuntura, la medicina natural y la homeopatía como alternativa a los medicamentos.

Pasos a seguir cuando se adopta un gato de la calle

Antes de nada, hay que tener en cuenta que la adopción de una animal es una responsabilidad muy grande que no hay que subestimar; debe ser una decisión responsable y meditada. Cuando la decisión ya ha sido tomada y queremos adoptar un gato de la calle tenemos que saber cuales son los pasos a seguir. Empezando por una desparasitación, una vacunación y después… la adaptación del felino a nuestro hogar. En este post te explicamos todo lo que tienes que hacer si has decido adoptar un calle que vivía hasta ahora en la calle.

 

1. Recoger a un gato de la calle

Un gato abandonado o que ha nacido en la calle necesita ayuda. Una posibilidad cuando se localiza a un felino en apuros en la calle es adoptarlo. En este caso, la primera pregunta que hay que hacerse es si se está preparado para adoptar a un animal. La decisión ha de ser tomada con responsabilidad: el gato adoptado pasará a formar parte de la familia.

La primera pauta para recoger a un gato de la calle es tener precaución: no es extraño que el felino trate de mordernos. Un tono sosegado y algo de comida ayudarán a tranquilizarle. Además, pedir ayuda a un veterinario o especialista en gatos servirá de apoyo.

Un transportín para animales será un buen aliado en esta tarea: una vez que se logra recoger al gato, este artilugio servirá para desplazarse con él a casa sin peligro.

2. Adoptar a un gato de la calle: la llegada a casa

El primer contacto del gato rescatado con su nuevo hogar es muy importante. Hay que abrir todas las puertas de la casa y dejar al gato que deambule a sus anchas por las habitaciones.

Un felino recogido de la calle, sin embargo, puede sentir miedo en su nuevo hogar. El gato temeroso suele esconderse debajo de un sofá o mueble que le sirva como refugio. Nuestras palabras de cariño reconfortarán al gato, que cada vez se sentirá más confiado. También hay que visitar al felino -sin forzarle- con frecuencia: estos encuentros ayudarán a que se familiarice con nosotros.

3. Adoptar un gato de la calle: los primeros días

El gato recogido de la calle habrá elegido su habitación preferida dentro de su nueva casa, donde se sentirá a salvo y protegido. Este cuarto será donde pase la mayor parte del tiempo o el sitio que haya seleccionado para esconderse.

Los dos o tres primeros días del felino adoptado en casa resultan cruciales. Por eso, conviene que durante este periodo tenga todo lo que necesita a su alcance, dentro del espacio elegido por él. Lacomida, bebida y arenero del gato hay que colocarlos en esta habitación seleccionada por el animal, que siempre debe permanecer abierta.

Los juguetes, pelotas, ratones y otros peluches para felinos también resultan de utilidad para que el gato supere, poco a poco, su temor.

 

Cuando decidimos adoptar un gato de la calle nunca es fácil que éste termine de confiar en nosotros: puedes acudir a un centro veterinario o a una asociación para que te ayuden a que los dos convivais perfectamente. Si ya tenemos otro gato en casa, existe la posibilidad de que ambos no se lleven bien: el transportín será el mejor aliado para que los dos felinos realicen su primer contacto, ya que evitaremos así una «pelea de gatos». Aunque seguramente lo más importante antes de acoger un gato en nuestro hogar es asegurarnos de que éste no transporta ninguna enfermedad, que pueda ser peligrosa tanto para los demás animales de la casa como para las personas que vivan en ese hogar.

Consejos para cocinar la carne de ternera o de vaca

A la hora de cocinar la carne en casa debemos asegurarnos de que ésta queda bien hecha. Las carnes de ternera o vacuno que queden un poco crudas pueden contener bacterias que pueden causar una intoxicación alimentaria. De la misma forma, es importante que la carne se haya conservado correctamente en un congelador antes de cocinarla. En este post te damos algunas claves para cocinar la carne de ternera o de vaca para saber qué coción es más recomendada para cada una de ellas.

Cocciones más recomendadas para la carne de vaca

La SENC señala que, de entre las muchas formas de cocinar la carne (plancha, horno, hervida, en guisos o cocidos, fritas, etcétera), las técnicas de cocción más saludables son la plancha, el asado y el hervido, porque no precisan el uso de grasas. La utilización de mucho aceite para cocinar una carne aumentará el aporte de calorías del plato y ello puede resultar, a largo plazo, en una ganancia de peso indeseada.

  • El asado, además, presenta otro posible beneficio: si se comienza la cocción a fuego fuerte, ello forma una costra superficial en la carne que conserva mejor los nutrientes de la pieza, además de dar lugar a una carne más jugosa y sabrosa.
  • Por el contrario, la cocción al vapor, los hervidos o los guisados (métodos de cocción a temperaturas de hasta 100°C, pero durante más tiempo) generan una mayor pérdida de algunas vitaminas solubles en agua.
  • Los horneados (un método de cocción que eleva hasta 200°C la superficie del alimento, pero sin una llama directa) también son recomendables, a no ser que se utilice una gran cantidad de grasas en su elaboración.
  • Sucede lo mismo con la cocción al microondas (que genera una vibración de las moléculas de agua, lo cual produce calor). Cuanta menos grasa se utilice en la elaboración del plato, mejor.

Otra forma de cocinar la carne: a la barbacoa o a la parrilla

Los asados a la parrilla y las barbacoas, pese a ser técnicas culinarias muy prácticas que se adaptan muy bien a las actividades y reuniones al aire libre, generan temperaturas de hasta a 400°C, algo no recomendable. Estos métodos de cocción, que algunas veces utilizan una llama directa para cocinar los alimentos, generan compuestos químicos potencialmente cancerígenos, de entre los que destacan unos productos denominados «hidrocarburos aromáticos policíclicos». Carlos Alberto González, médico epidemiólogo del Instituto Catalán de Oncología, indicó en 2010 que estos compuestos químicos son altamente perjudiciales. Al parecer, tal y comoseñala el Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer, el tipo de madera utilizada para las brasas también puede ser un factor importante en la producción de productos químicos que contaminan los alimentos. Las maderas duras, tales como las de roble y nogal queman de forma limpia y son más recomendables.

También se aconseja eliminar la grasa visible y realizar una precocción de las carnes en el microondas o en el horno antes de asarlas, para que el tiempo de cocción y la generación de compuestos indeseables sea menor. Lo más prudente es, en todo caso, no consumir con frecuencia o en grandes cantidades carne quemada o carbonizada.

 

Si algo tienen claro todos los cocineros y especialistas, es que las técnicas de cocción más saludables son la plancha, el asado y el hervido. De la misma forma, antes de cocinarla, es recomendable eliminar la grasa visible de la carne: de esta forma, eliminaremos aportes calóricos de sobra. Lo ideal es, como se puede comprobar, alternar unas cocciones con otras, sin abusar del consumo de carnes fritas o rebozadas. Finalmente, lo mejor a la hora de comer carne es mezclarla con alguna verdura asado o la plancha, que añadirá un toque saludable a nuestra comida.

Diferentes exámenes oficiales de inglés con distintas finalidades

Hablar, escribir bien un segundo idioma y obtener el título oficial se ha convertido en un requisito muy importante a la hora de conseguir trabajo hoy en día. Existen varios exámenes oficiales realizados por diferentes instituciones y aunque la más famosa de todas sea la Universidad de Cambridge, algunas otras son más importantes para acceder a instituciones educativas. El título que más nos conviene sacarnos dependerá de la necesidades profesionales de cada uno. En este post vamos a ver las diferencias que existen entre éstos títulos.

 

TOEFL: para el acceso a instituciones educativas

El TOEFL, o Test of English as Foreign Language, es un examen que evalúa el nivel de conocimiento del inglés, así como las habilidades para comunicarse en lengua inglesa en el ámbito académico. Es una prueba que se solicita para acceder a determinados estudios. «La mayor parte de las universidades estadounidenses lo piden a sus alumnos no nativos en inglés como requisito de entrada», explica una portavoz de EF Education First. Más de 8.500 universidades y organismos en 130 países aceptan este examen, según indica Educational Testing Services (ETS), que gestiona en todo el mundo estas pruebas.

Este examen está pensado, por lo tanto, para los alumnos que quieren cursar estudios en un país extranjero, en especial Estados Unidos, cuya lengua vehicular es el inglés. Su particularidad es que no es un examen que se aprueba o se suspende, sino que se alcanza una puntuación entre 0 y 120, que acredita el nivel de conocimiento. Se puede realizar tanto en Internet, TOEFL iBT, como en papel, TOEFL PBT, cuando los centros carezcan de acceso a Internet.

  • Cómo es el examen. El TOEFL consta de cuatro pruebas: comprensión lectora, comprensión auditiva, prueba de escritura y prueba de expresión oral. En cada prueba se obtiene una puntuación máxima de 30. La nota final es la suma de las notas individuales y tiene una vigencia de dos años. La inscripción para realizar este examen puede gestionarse en el portal oficial ETS.

TOEIC: para demostrar nuestras competencias lingüísticas en el trabajo

TOEIC, o Test of English for International Communication, se realiza para certificar en el ámbito laboral los conocimientos en inglés y optar a un puesto, sobre todo, en Estados Unidos. El resultado de esta prueba la solicitan, por lo tanto, las empresas, en especial las compañías multinacionales. «Lo utilizan -señalan desde EF-Cursos de inglés- como requisito de entrada y lo incluyen en sus programas de formación para empleados».

Este examen tampoco se aprueba ni se suspende. La nota final es una cifra entre 10 y 990, que las empresas tienen en cuenta para analizar el dominio del idioma de la persona que demanda un puesto. Así se sabe si esta domina el idioma lo suficiente como para tomar parte en reuniones en inglés o ser un miembro del equipo directivo, entre otros perfiles.

  • Cómo es el examen. El TOEIC está compuesto por 200 preguntas tipo test, con cuatro opciones de respuesta en cada una. Las cuestiones se formulan por escrito y mediante audio para valorar tanto la comprensión lectora como auditiva. La nota obtenida tiene una vigencia de dos años.

IELTS: por motivos educativos o laborales

El IELTS, o International English Language Testing System, admite dos posibilidades: una prueba académica (IELTS academic) y otra con fines laborales (IELTS general training). Mientras que la primera acredita los conocimientos de inglés requeridos por un centro de enseñanza extranjero, la segunda se dirige a quienes deban justificar cierto dominio para acceder a un empleo. En este caso, ambas pruebas evalúan los conocimientos en inglés británico, tanto la gramática como la pronunciación.

Este examen parte de la universidad de Cambridge y el British Council. Como los anteriores, una vez realizado, se obtiene una nota que, en su caso, es un número entre 1 y 9. «La gran parte de las instituciones exigen de 6,5 a 7 como requisito de entrada», precisan en EF.

  • Cómo es el examen. El IELTS se divide en cuatro pruebas, las mismas que el TOEFL: compresión auditiva, comprensión lectora, escritura y expresión oral. Se puede gestionar a través de Internet lasolicitud para realizar el examen y, como los anteriores, el resultado tiene una vigencia de dos años.

Universidad de Cambridge: para evaluar el conocimiento de gramática

Los exámenes de la Universidad de Cambridge gozan de reconocimiento mundial. Son los más elegidos por los jóvenes que estudian esta lengua, para evaluar sus conocimientos a medida que avanzan. Y es que hay tres niveles: First, Advanced y Proficiency. Ninguno de ellos se exigen específicamente como requisito para acceder a un centro de estudios o un puesto de trabajo.

Este es un examen general para medir el nivel de conocimiento de esta lengua. A diferencia de los anteriores exámenes, estos sí se aprueban o suspenden. Solo se obtiene el título al que se opta si se demuestra el nivel de conocimientos requerido, que se adecúa al marco común europeo de referencia para las lenguas, «creado por el Consejo de Europa para medir el nivel de comprensión y expresión orales y escritas del inglés de forma homogénea en los países miembros».

  • Cómo es el examen. Quienes quieran superar el First (nivel B2 del marco de referencia europea) han de acreditar que entienden textos complejos y hablan inglés con un grado suficiente de fluidez. El examen de Advanced (nivel C1) exige demostrar que se comprenden textos extensos difíciles y se habla con fluidez, en caso de ser necesario hacerlo con fines sociales, académicos y profesionales. Para aprobar el Proficiency (nivel C2), hay que dejar patente que se domina la lengua como lo hace una persona nativa.

 

Ya que no todos los exámenes son iguales, cada uno de ellos acreditan unas competencias distintas y por lo tanto, cada uno tiene que elegir su título en función de sus necesidades profesionales. Y aunque no todos son iguales, en cada examen podremos encontrar diferentes niveles, desde el nivel básico hasta el nivel bilingüe del que domine la lengua como lo hace un nativo.